Una cosita nomás

Unas palabrillas que no se las voy a decir al individuo en la cara, porque afectaría mi relación con demasiadas personas a las que les guardo aprecio:

Despreciaste mi trabajo desde el primer momento, siendo que hice mucho y mejor que otros. Me culpaste de cosas que eran puramente tu responsabilidad. Nunca ocultaste que hubieras preferido mil veces que estuviese N en mi lugar. Cuando mi cadáver militante todavía estaba calentito, la invitaste a participar en la agrupación. 
No me entra en mi obeso cuerpo la alegría de que ella ahora esté claramente con esa agrupación de derecha a la que tanto asco le tenés. (Aunque siempre estuvo con ellos, te lo dijimos y no diste bola). Siento pena porque esa agrupación, que pese a elegirte como presidente está llena de buena gente con buenas intenciones, se derrumba, y es tu culpa.
La próxima, Guillermito, pensá con la cabeza que tenés sobre los hombros, no con la otra.

Crónica de mi paso por la Facultad de Psicología (hasta la fecha)

La primera vez que entré a la Facultad de Psicología, allá a lo lejos, en junio de 2009, realmente creí que ese era mi lugar. Todas las paredes llenas de carteles, de colores; tantas aulas llenas de personas; y hippies! No te puedo explicar como amé ver gente con rastas que vendía aritos y pulseras de macramé en la entrada de la Universidad.
Después transité el curso de ingreso, donde conocí gente copada -y también insoportables- que más tarde cruzaría en pasillos y cursadas, o que no volvería a ver nunca más.
Aprobé el examen de ingreso, con un 8, la nota más alta de la comisión.
Y en marzo del año siguiente -porque los ingresantes empiezan más temprano- estaba empezando mi primer año de la Licenciatura en Psicología.
El primer cuatrimestre fue intachable. De las 3 materias había promocionado las 2 que eran promocionables -Filosofía del Hombre y Epistemología General- y en las vacaciones de invierno dí el final de la tercera, Introducción a la Psicología. Muy pobre ese final. Estaba demasiado nerviosa, no podía poner dos frases una al lado de la otra, temblaba... pero la profesora Di Leo se apiadó y salí con un 7 en la libreta.
Para el segundo cuatrimestre ya había encontrado un grupo de amigos -que gracias a los dioses después perdí- y, además, el mejor bonus track: empecé a salir con mi novio. Así que lo aplicada que fui el primer cuatrimestre se fue corriendo sin dejar rastros, y jamás volví a tener las lecturas al día -lo que es un crimen, en esta carrera por lo menos-. Pero bueno, mal que mal, salí con todas las materias aprobadas -Introducción a la Investigación Psicológica promocionada- y en el verano dí el final de Biología Humana, otro 7 en la libreta, pero este bien ganado... Fue la experiencia más traumante de mi vida, de 8am a 8pm esperando para rendir, con los nervios al tope, para que me digan 'no, che, volvé el lunes'... la puta que los parió.
En fin, llegó 2º año y no podía creer lo rápido que estaba pasando todo. A ese ritmo iba a terminar la carrera sin darme cuenta. I L U S A ! Empezamos el año con Sistemas Psicológicos Contemporáneos I, Sociología, Psicología del Desarrollo, Introducción a la Teoría Psicoanalítica y GRAP II, pero esa última no cuenta porque no tenés que estudiar, es como una mezcla de 'grupo de debate' con 'psicología grupal', para que te hagas una idea. Un recuperatorio imprevisto me hizo tropezar y en la caída, por  salvar Psicoanalítica, mandé a volar a Sistemas, primer materia perdida. Terminé Sociología con los dos parciales raspando, y eso que me gustaba mucho. Psicoanalítica con 8 y 6, bien. Pero resulta que Psicología del Desarrollo, por primera vez en la historia de la carrera, era anual, y lareconchadedios. Dos días antes del parcial de PdD, mi novio me corta, así que no estudié, por lo que no me presenté al parcial. Me iba a tirar directamente al recuperatorio que era después de las vacaciones de invierno. A la semana volví con mi novio. (Perdí el parcial al pedo, lo se)
Esas vacaciones empezaron mis dudas con respecto a la carrera. Se me hacía realmente imposible sentarme a estudiar, no podía concentrarme y leer una página de corrido, me producía un terrible rechazo...


- Continuará -

Moción de orden!

Asamblea de estudiantes de Psicología, UNMDP.

Cuando para tomar cualquier decisión de la vida cotidiana enunciás lo que querés hacer y después exclamás 'por la positivaaa?', ya no hay vuelta atrás.


Vic Granada, militante independiente.

Que la primera caída en público en la facultad del año haya sido a mediados de septiembre es un gran gran increíblemente gran avance. Además no había nadie conocido, me levanté rápido. Nono, fue genial, de verdad. (?)

Putas, Harry, putas.

Qué feo debe ser llevar la careta puesta todo el día y que nadie te conozca de verdad; y que, por lo tanto, nadie te quiera por quien sos. Qué feo que todas tus relaciones con otras personas se basen en usar y ser usada. Qué feo debe ser aparentar que sos súper feliz y por dentro saber que nunca vas a poder tener lo que querés. Qué feo que la gente que llega a conocerte de verdad te deje de querer, y hasta te llegue a odiar.


Ojalá que algún día la gente te vea por lo que sos de verdad, por la basura que sos.


Y ojalá que entiendas que no podés ir por la vida cagándote en todos, porque un día te vas a encontrar con una persona no tan pacífica como yo, que no la va a dudar antes de llevarte arrastrando de los pelos a pasear por todo el complejo universitario.

Desempolvando fichas de HistoriaSocialDeLaPsicología. Obviamente no voy a llegar a rendirlo, tengo nulas esperanzas de llegar a estudiar todo. Entonces para qué? Para no sentirme tan culpable de no hacer nada académico hace semanas.
Estoy muy desganada con respecto a todo lo que sea de la facultad. 
Antes, armar los horarios era la parte más emocionante y divertida, y cuando lograba un horario decente me sentía dios; ahora, a una semana de tener que anotarme, no tengo idea ni de que voy a cursar. Es más, me encantaría tomarme un cuatrimestre sabático, pero siendo que la facultad es mi única obligación, (no trabajo ni voy al gimnasio, ni estudio otras cosas) me sentiría una total fracasada si no puedo con esto.
The question is... ¿por qué? 
Creo que no me dan ganas de cursar porque no tengo un grupo de amistades en la facultad. Casi que son más las personas que evito dentro de ese edificio que las que tengo ganas de cruzarme; y con las pocas personas con las que tengo buena relación, por una u otra razón no podemos coincidir en las clases. Lo peor es que antes de empezar la facultad estaba mentalizada en que iba a tener compañeros, iba a conocer gente, me iba a llevar bien, pero no iba a tener un grupo de amigos, y estaba todo perfecto, pero el año pasado por un momento tuve la ilusión de que si tenía un grupo y, aunque finalmente fue mejor perderlos que encontrarlos, se extraña eso de ver las mismas caras todos los días. ¿Nostalgia escolar tal vez?